Exaltación de la Cruz vivió un 14 de septiembre en donde sus vecinos le dieron color en un ambiente familiar y tradicional típico de un distrito que sintió la baja en la actividad comercial
Las fiestas en la Plaza San Martín dejan más de lo que se puede ver a simple vista durante los actos formales, siempre los aniversarios son termómetros que permiten medir varios aspectos de la vida de un distrito que vive los vaivenes económicos y políticos, con su formato particular e intenso.
En primeras horas de la mañana ya se encontraba una nutrida presencia en el Palacio Municipal, que reunió a las más importantes figuras políticas que en algunos casos sin manifestarlo, ya están pensando en primera instancia en la elecciones legislativas y a largo plazo, a las que decidan cuatro años de administración del distrito.
Como dato inusual para la recepción que ofrece la gestión a los vecinos, fue la presencia del bloque Opositor casi en su totalidad, inmerso en la tertulia típica que se conforma antes del izamiento de la bandera, aunque se mantuvieron en su propio núcleo saludaron y participaron activamente, es un hecho que refleja sin dudas, un mensaje político.
Afuera los stands, los comercios, las parrillas, no lucían con el mismo ritmo de los últimos años, la caída de la actividad económica acompañada por una recesión que se profundiza, hizo mella en las recaudaciones de los emprendimientos, que aunque tuvieron un día de mayor venta, no fue igual a festejos anteriores.
Sin embargo, lo más importante fue el entusiasmo y alegría imperturbable, tanto de los vecinos como de los visitantes, que atestaron los accesos y las calles de Capilla del Señor, que lució a la altura de las expectativas, mostrando capacidad para contener Fiestas Patronales que cada vez atraen más público.